12 November, 2008
category: Seguridad física
Ya que las cerraduras biométricas se han hecho asequibles a nivel de consumidor, los propietarios de casas pueden dejar de preocuparse si pierden o olvidan las llaves, a la vez que mantienen un alto nivel de seguridad en el hogar, según un artículo del Chicago Tribune.
El ejemplo específico es el cerrojo SmartScan, el cual opera con la tecnología de escaneo subcutáneo, mucho más difícil de piratear que los escáneres que leen la superficie de la piel, y requiere que el dedo a escanear forme parte de un ser humano viviente, a la vez que no exige manos limpias o secas.
Además de esta tecnología, el SmartScan se anuncia como fácil de instalar y muy funcional, ya que puede registrar hasta 50 impresiones y restringir cada una a momentos y/o días específicos en los que se permite el acceso.
Lea el artículo completo en su inglés original.