Aunque últimamente se ha avanzado mucho en la biometría, desde el punto de vista tecnológico, haciéndola más barata, eficiente, efectiva y asequible, los rasgos biométricos suaves – como la estatura, peso, raza y marcas corporales – son aún muy usados por las fuerzas del orden para identificar criminales.

Muchos utilizan sistemas informáticos para identificar tatuajes en los que se introducen palabras claves que los describen en una base de datos de imágenes. Sin embargo, dos investigadores han desarrollado una solución que esperan haga mucho más eficiente el uso de estas bases de datos.

El sistema de Anil Jain y Jung-Eun Lee para la identificación de tatuajes se concentra más en el color, forma y textura. Se llama Tattoo-ID y funciona haciendo coincidir puntos claves en el tatuaje con los de las descripciones en la base de datos, dando resultados basados en el porciento de coincidencia en vez de mostrar una lista de todos los tatuajes que coinciden con la palabra clave.

Aunque los nuevos sistemas biométricos son más efectivos, no muchas agencias del orden han adoptado la biometría ni tampoco muchos criminales han dado sus datos biométricos. Jain y Lee esperan que su sistema sea de gran ayuda para las agencias que aún emplean este tipo de biometría.

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