Microchip Technology, ubicada en Arizona, ha desarrollado una nueva tecnología que aprovecha el cuerpo de la persona para crear un proceso seguro de autenticación.

Según informa la revista MIT Technology Review, el nuevo sistema de Microchip Tech se denomina BodyCom y utiliza el cuerpo como un intermediario en un sistema de comunicación de corto alcance. Para realizar la autenticación, el usuario llevaría en su bolsillo un control remoto y tocaría una almohadilla para completar el circuito.

La tecnología se activa cuando el usuario toca la almohadilla o una estación base. La base envía una señal de 125 kilohercios a través del cuerpo hasta el control remoto. Este responde con una señal de ocho megahercios para autentificar el acceso. También es posible la autenticación sin contacto.

Añadir el sistema a un dispositivo cuesta entre 3 y 4 dólares. Este puede emplearse para asegurar los bloqueos de puertas, herramientas y armas de fuego. Una compañía en Italia lo está empleando en los motociclistas como medio para asegurarse de que utilizan sus cascos.

Un aspecto desfavorable es que actualmente no se puede determinar positivamente si la persona que porta el control remoto tiene permiso para el acceso al sitio o medio que se protege, aunque la compañía asegura que esta capacidad será posible en el futuro.