Giesecke & Devrient: es un asunto de familia
19 March, 2008
category: Banca, EMV, Identificación en campus, NFC, Pagos, Pagos sin contacto
La compañía se enorgullece de sus 155 años de historia, así como de su brillante futuro
Por Andy Williams, redactor colaborador
G&D se enorgullece de ser el segundo productor de tarjetas inteligentes del mundo. Sin embargo, esta compañía es mucho más que solo tarjetas inteligentes. Para empezar, su genealogía se remonta a 1852, cuando dos hombres fundaron la compañía. Por otra parte, imprime billetes de banco para un gran número de países en el mundo y le suministra a muchos, como a la Reserva Federal en Estados Unidos, los sistemas utilizados para contar y clasificar esos billetes de banco y eliminar falsificaciones.
Sin embargo, la característica más peculiar de esta compañía de 155 años, con oficinas en todas partes del mundo, es esta: No la encontrará en ninguna bolsa de valores. Es una compañía privada, la propietaria es una señora descendiente directa de uno de los fundadores.
G&D se fundó el 1ro de junio de 1852 cuando Hermann F. Giesecke (1831-1900), en ese momento de 21 años, y Alphonse Devrient (1821-1878), de 31, se unieron para crear Giesecke & Devrient.
Según la historia de la compañía, comenzaron en Leipzig y en un corto período de tiempo los socios la habían ya convertido en una compañía líder en el negocio de hacer dinero – literalmente – gracias a algunas invenciones vanguardistas en Guillochier, y tecnología de impresión y anti-falsificación.
Una de las descendientes de la familia Devrient fue Jutta Devrient, quien se casó con Siegfried Otto. La propietaria actual de G&D, Verena von Mitschke-Collande, es hija de este matrimonio. Casualmente, fue Otto, un antiguo prisionero de guerra ruso y yerno del último presidente de G&D, Ludwig Devrient, quien sacó del olvido a G&D después de la Segunda Guerra Mundial. Cuando parecía que los rusos asumirían el control de la compañía, Otto la trasladó de Leipzig a Múnich y la instaló provisionalmente en un ático.
A diferencia de los fundadores, Otto ni siquiera tenía acceso a una prensa. Pero demostró tener un increíble talento para la improvisación. Él y sus empleados adquirían primero los contratos y después buscaban los equipos necesarios para llevarlos a cabo. Seis meses después, con los contratos en la mano, “comenzaron las operaciones en un edificio en el aeropuerto Riem de Múnich. Fue allí, con 28 trabajadores, que se sentaron las bases para la creación de una compañía internacional de alta tecnología”.
Hoy en día, mientras G&D aún imprime billetes de banco y crea sistemas para procesarlos, se ha ramificado en diferentes industrias – tiene 53 filiales y oficinas en todo el mundo – y se refiere a sí misma como un “grupo internacional de tecnología”.
A finales de 2006, la compañía con sede en Múnich tenía aproximadamente 8,300 empleados, cerca de 4,900 de ellos fuera de Alemania, e ingresos aproximados a los 1.3 mil millones de euros, unos U.S. $1.9 mil millones. En comparación, G&D tenía 4,254 empleados generando ingresos de 676 millones de euros, 979 millones de dólares, hace 10 años.
La compañía es dirigida por una junta directiva de cinco miembros, que incluye al presidente y director ejecutivo Karsten Ottenberg. Tres de las posiciones en la junta pertenecen a los hombres que operan cada una de las tres unidades de negocios de la compañía: Michael Kuemmerle, Tarjetas y Servicios; Hans Wolfgang Kunz, Soluciones de Gobierno; y Walter Schlebusch, Billetes de Banco. El quinto es su director de finanzas y de relaciones laborales, Peter Zattler.
“De cierta manera, es fascinante que esta propiedad sea de la familia durante tan largo período de tiempo”, comenta Kuemmerle, cuya unidad de Tarjetas y Servicios incluye tarjetas de pago, tarjetas SIM y ahora también de NFC (Comunicación a Distancia Corta, por sus siglas en inglés).
Mientras que la impresión y el procesamiento de billetes de banco ha sido el pan de cada día para G&D en estos más de 150 años – hoy la compañía imprime billetes de banco para unos 80 países – cuando las tarjetas de crédito (o “dinero plástico”, como las llama Kuemmerle,) aparecieron por primera vez y se difundieron en los años 70, a G&D le pareció lógico investigar el producto como una nueva fuente de negocio.
“Como nos dedicamos a la impresión de dinero físico, decidimos mirar el dinero virtual. El resultado fue un nuevo mercado de interés para G&D”, añade. “Como líder mundial, nosotros abastecemos básicamente a los principales bancos del mundo. Estamos presentes en 53 países, incluyendo Estados Unidos”.
Una de las áreas en que G&D fue de mucha utilidad fue en el desarrollo de la Tarjeta Eurocheque a finales de los años 60, que estaba conectada a la cuenta de cheques de la persona. “Si querías escribir un cheque, primero tenías que mostrar tu Tarjeta Eurocheque”, explica Kuemmerle sobre este precursor de la tarjeta de débito.
“Aún es la marca superior en las mentes de los alemanes”, agrega. “Incluso hoy, si vas a una tienda minorista, puede ser que el cajero te pregunte si quieres pagar con tu Tarjeta EC”. Es el nombre real de una marca que ha sido interiorizada por la mente de la población. Eso es lo que aún estamos produciendo, pero ahora se está tratando como una tarjeta de débito”.
Documentos de identidad y mucho más
Entre las áreas que supervisa Kunz están los pasaportes electrónicos y documentos de identidad. Su unidad de negocio para soluciones de gobierno cubre tarjetas de identificación y soluciones de seguridad gubernamentales para los países a los que brinda servicio G&D.
G&D está involucrada en numerosos proyectos a nivel mundial. “En Ontario, Canadá, estamos produciendo tarjetas de salud y licencias de conducir. Producimos pasaportes con chip en Macedonia, un proyecto que incluye pasaportes electrónicos, tarjetas de identificación y licencias de conducir.
“Entonces”, agrega, “tenemos otros países como Egipto, al que estamos abasteciendo de 53 millones de tarjetas nacionales de identificación seguras. Hemos establecido allí una fábrica para la producción y personalización de las tarjetas. En Taiwan fuimos la primera compañía que suministró una tarjeta de salud con chip. También hemos abastecido de tarjetas basadas en chip a los sistemas de tarjetas de salud en Alemania y Austria. En la rama del transporte, tenemos clientes en todo el mundo, por ejemplo, el Metro de Washington D.C. Además proveemos de boletos de tránsito sin contacto a Londres y Beijing”.
“También brindamos a los países asesoramiento en temas de seguridad e infraestructuras de clave pública – para firmas digitales – además de imprimir documentos de seguridad, cheques del gobierno, certificados de acciones y otros tipos de certificados de valor que necesitan ser muy seguros para que no puedan ser alterados”, añade.
Una de las compañías que supervisa Junz es Secunet Security Networks, una agencia informática alemana de la cual G&D tiene la mayor parte de las acciones. Tiene un papel fundamental en muchos de estos proyectos. “Secunet ofrece sistemas de seguridad de alto nivel, especialmente para gobiernos, que incluyen software con tecnología criptográfica y redes seguras”, explica Kunz.
G&D está además analizando con interés los mercados para las licencias de conducir. “En estos momentos, estamos promoviendo activamente nuestros productos de licencias de conducir a nivel internacional”, anuncia Kunz.
El mercado estadounidense de las licencias tiene gran atractivo para la compañía, pues los estados están investigando nuevas tecnologías, añade Steve Reber, Director Ejecutivo de G&D Norte América (GDAI), con sede en Dulles, Virginia.
La oficina norteamericana de G&D fue establecida en 1990, inicialmente para vender, producir y dar servicio a los sistemas procesadores de billetes de banco a los clientes de la región. “Le suministramos a la Reserva Federal los sistemas de alta velocidad que clasifican los billetes provenientes de los bancos, encuentra los que deben ser eliminados de circulación o determina si alguno de los billetes ha sido falsificado”, explica Reber. “”Estos sistemas de reconocimiento de alta velocidad pueden clasificar 40 billetes en un segundo y luego atarlos”.
A mitad de los años 90, la división de G&D en Estados Unidos se amplió para incluir tarjetas y sistemas de tarjetas. En 1997 la compañía adquirió Cardtech, un fabricante de tarjetas de Twinsburg, Ohio. Sus ofertas ahora incluyen soluciones para gobiernos y agencias gubernamentales, operadores de tecnología inalámbrica, instituciones financieras, la industria de la salud, acceso protegido, identificación electrónica e infraestructuras de clave pública. Durante ese período, GDAI comenzó a ofrecer sus soluciones y sistemas procesadores de billetes de banco a los mercados de bancos comerciales, tránsito, transporte blindado y casinos para verificar depósitos y contar dinero.
En diciembre de 1999, GDAI abrió su nueva instalación de producción de 134,500 pies cuadrados en Dulles. En 2006, GDAI y G&D Cardtech se unieron para formar Giesecke & Devrient America Inc., y es ahora una de las filiales más grandes del Grupo G&D.
Un mercado en el cual la compañía no está interesada es el de los programas de identificación del gobierno de Estados Unidos regulados por la HSPD-12. “En estos momentos no tenemos interés en los programas de identificación del gobierno debido a sus siempre cambiantes regulaciones”. “Decidimos interesarnos en otras partes del negocio – tránsito, tarjetas de pago, crédito, débito, tarjetas de regalo, licencias de conducir y telecomunicación, ofreciendo tarjetas SIM para teléfonos GSM”, explica Reber.
En términos monetarios, la compañía en Estados Unidos ha crecido rápidamente, dice. Uno de sus mercados más grandes es el de las tarjetas de crédito, que son producidas en la planta de Twinsburg. “Somos un abastecedor líder de tarjetas de tránsito sin contacto en Estados Unidos”, afirma. “Ese mercado ha seguido creciendo a medida que más ciudades se mueven en esa dirección”.
Trabajando activamente con NFC
Con la Comunicación a Distancia Corta, una tecnología inventada por Sony y NXP Semiconductors, haciéndose cada vez más presente, G&D ha tomado también su lugar como uno de los principales participantes en este campo. Es miembro de NFC Forum, una organización diseñada para estimular la implementación de esta tecnología, y ofrece varios productos y servicios a los ecosistemas, como tarjetas SIM con NFC, tarjetas de memoria seguras para ser utilizadas como un medio de almacenamiento seguro en teléfonos celulares, y para el desarrollo e instalación de aplicaciones propensas a tener riesgos de seguridad, como las aplicaciones de pagos móviles.
Un factor clave para esta ¬última área es la empresa conjunta que creó G&D con Nokia, la fabricante de celulares. La compañía se llama Venyon y su propósito es desarrollar y operar una plataforma de servicios segura para las transmisiones por aire (OTA, por sus siglas en inglés) de las aplicaciones, tales como tarjetas de crédito y boletos de transporte para los dispositivos móviles con NFC de los clientes.
Venyon es la compañía que transmitirá por aire, de manera segura, las aplicaciones NFC propensas a tener riesgo de seguridad, como la compra de boletos o pagos móviles, agrega Kuemmerle. El razonamiento detrás de esta operación es sencillo. “Tenemos que asegurarnos de que cuando cargamos el applet de tarjeta de crédito a un teléfono celular con NFC realmente se carga a ese celular, y que podamos verificar que así fue. G&D está muy bien preparada para ello porque lo enfocamos desde la perspectiva de la tecnología de seguridad”.
Un buen ejemplo de esto es el proyecto Turquía. Turkcell, una compañía abastecedora de celulares, y Garanti Bank han lanzado una prueba de NFC para pagos móviles que involucra una aplicación de tarjetas de crédito sin contacto MasterCard PayPass en una tarjeta SIM de G&D habilitada con NFC. Venyon está a cargo de la transmisión y administración segura de la función de pago por aire.
“Tenemos confianza en la NFC. Prevemos un potencial de mercado grande y siempre intentamos estar a la vanguardia”, asegura Kuemmerle.
“NFC es la tecnología que fusiona las aplicaciones de identificación, bancarias y de tránsito en el dispositivo móvil”, añade. “Estos mercados están convergiendo. Nuestra participación en este mercado constituye una inversión importante, en eso somos un socio de confianza para transmisiones por aire seguras y como proveedor de una plataforma segura para aplicaciones NFC sensibles. En resumen, estamos trabajando en diferentes arquitecturas para esta plataforma segura, ya sea basada en SIM, integrada o desmontable. Estamos básicamente abasteciendo todo tipo de arquitecturas para servir a un mercado en crecimiento”.
Las innovaciones ayudan a que G&D siga creciendo
Con la seguridad en la primera línea del negocio de G&D a nivel mundial, no sorprende que la mayoría de sus logros hayan sido en esta área.
“Una innovación de gran importancia que hemos desarrollado es la imagen protegida con láser”, alega Kunz. Muchas fotos que se producen hoy en día están hechas con impresoras de inyección de tinta u otras tecnologías “fáciles de falsificar. Pero la tecnología láser tiene una gran ventaja. La información se graba en diferentes capas de la tarjeta. De hecho, podemos mejorar la seguridad de una foto a color en la tarjeta de tal manera que nos damos cuenta si alguien ha tratado de alterar la foto”.
Como explicó más ampliamente, la imagen protegida con láser combina la alta seguridad de la tecnología láser con las ventajas ópticas de las fotos a color. La imagen se desglosa en sus componentes grises y de color. Los componentes de color se aplican a la tarjeta mediante un proceso de termotransferencia, para después añadir con el láser los componentes grises en un registro perfecto. Un falsificador puede tratar de manipular los colores, pero no la parte de la imagen que ha sido grabada con el láser. “Te das cuenta inmediatamente que alguien ha tratado de alterar la foto”, afirma Kunz.
Una innovación de G&D es el material utilizado para producir las tarjetas, particularmente las de identidad. “El policarbonato, usado para muchas tarjetas, es un material seguro pero no muy flexible”, dice Kunz. “G&D ha desarrollado recientemente un material único que combina las características de larga duración que tiene el policarbonato y la flexibilidad del PETG. Al combinar ambos materiales, las características físicas de la tarjeta final pueden ser ajustadas según los requisitos específicos”.
Otro logro de G&D es la forma en que aplican las antenas en las tarjetas sin contacto. Normalmente la antena es conectada al chip sin contacto, pero G&D desarrolló una tinta conductora que sirve como una antena impresa – lo que quiere decir que no se rompe – cortando así la conexión con el chip. “Hemos industrializado esta técnica para tarjetas y pasaportes”, declara Kunz.
El comercio minorista es otro mercado que G&D está explorando. “Entre lo más nuevo que hemos hecho en cuanto al procesamiento de billetes de banco es entrar en el mercado del comercio minorista con equipos para procesar efectivo”, agrega Reber de GDAI. “Estos son equipos que estarían en la oficina donde se maneja el efectivo de una tienda”.
Añade: “También hay una tendencia general a usar terminales de autoservicio para las órdenes y los pagos en efectivo. Podemos extender esto a los restaurantes”. Por ejemplo, un cliente pudiera ir a un establecimiento de comida rápida, escoger su orden del quiosco y pagar allí mismo. Algunos sistemas parecidos a éste, aunque no necesariamente producidos por GDAI, están ya en uso en algunos campus.
Aunque algunos – mayormente productores de tarjetas sin contacto – señalan el día en que el efectivo ya no será necesario, la realidad es que la cantidad de efectivo que hay en circulación está creciendo “en un 3% o 4% al año”, afirma Reber. “El uso de los cheques ha disminuido también en Estados Unidos, pero pienso que cuando lleguemos al punto en que la gente empiece a usar sus teléfonos móviles con NFC, éste será un método de pago muy interesante para todo tipo de cantidades” y puede llevar a la disminución del uso del efectivo.
Kuemmerle agrega: “Definitivamente, estamos viendo un mercado de medios de pagos creciente y dinámico, no solo en cuanto a la transición de la banda magnética a EMV, sino también para tarjetas de pago sin contacto y de interfaz dual. Y en el área de las telecomunicaciones seguirá habiendo una alta demanda de tarjetas SIM a nivel mundial”.
En cuanto el mercado de NFC, “hay un par de obstáculos que debemos rebasar, como la necesidad de normalizar el ecosistema para poner el mercado en funcionamiento”, reconoce. “Esperamos dar el primer paso importante del mercado de NFC en el 2008 y después tener un crecimiento gradual en los próximos años”.
Un mercado inundado de SIM
Una de los problemas que los fabricantes de SIM han tenido que enfrentar en los últimos dos años es la demanda de tarjetas SIM de bajo costo proveniente de mercados emergentes como China e India. “La dramática erosión de los precios de las tarjetas SIM en el 2006 se niveló en el 2007, pero es difícil predecir qué nos depara el futuro”, explica Reber. “Aún as¬¬í, G&D está cuidando su estructura de costo, por lo que puede ofrecer productos adecuados a las especificaciones de cada mercado y a precios competitivos”.
“Creemos que siempre habrá un mercado de segunda categoría para las tarjetas SIM, pero necesitas desarrollar uno de primera categoría para darle más oportunidades a los operadores”, dice Kunz. En otras palabras, agrega, los fabricantes en el futuro no sólo venderán tarjetas SIM, sino que ofrecerán también servicios adicionales basados en esta tecnología.
El futuro
“En el futuro la seguridad de la tarjeta SIM tendrá un papel importante, ya que los clientes de teléfonos móviles utilizarán cada vez más aplicaciones, además de las llamadas”, afirma Kunz.
También aumentará la demanda de tarjetas de identificación seguras. “Vamos a tener nuevas tarjetas nacionales de identificación con chip en Alemania y no deben ser fabricadas con una tecnología menos desarrollada que la utilizada para los actuales pasaportes electrónicos”, observa. “Nosotros ya hemos desarrollado las tecnologías necesarias para participar en este mercado”.
Ese espíritu de “yo sí puedo hacerlo”, que para G&D comenzó por aquellos lúgubres días después de la Segunda Guerra Mundial cuando Siegfried Otto agarró firmemente las riendas de la compañía, perdura hasta nuestros días. Nos preguntamos, sin embargo, si hoy Otto reconocería la empresa que revitalizó con tanto esfuerzo. Obviamente, aquella pequeña pero fuerte compañía de 28 empleados ha logrado un éxito que ni siquiera él hubiera podido imaginar.